lunes, 19 de noviembre de 2007

QUÉ SOY....?


Muchas veces seguramente se han preguntado “¿Qué soy?”, ¿qué se respondieron?

En una oportunidad en que por MSN me presentaron a un hermano, en el primer momento de la conversación me pregunta “¿qué eres?”…… Uyyyyy…!! En ese instante toda mi mente se revolucionó. Casi parecía que no comprendía… me respondía a mi misma y sentía un enorme vacío. Me decía ¿qué soy?...¡¡qué soy!!... Toda mi existencia laboral pasó en un instante por mi mente.

¿Soy arquitecta?. .. ¡¡NO!!... ¿soy administradora? ... ¡¡NO!! ¿soy constructora? ...
¡¡NOOO!!.... ¿soy un ser humano?... ummm, algo parecido… ¿soy cristiana?.. . Soy, soy, soy. De pronto… sabiendo que con quien hablaba era una persona ligada a las cuestiones espirituales, me resultaba aún más extraña la pregunta… a qué apuntaría la respuesta que esperaba…. si se refería a trabajo….. como es una pregunta que pocas veces hago, no lo comprendía… se referiría a la preparación espiritual?. .. me estaría preguntando, si soy tarotista, metafísica… reyquista?.. . ummm… tampoco me cuadraba la pregunta.

De pronto reaccioné… creerán que pasaron muchos minutos, no, no fue así… pero mi mente fue un torbellino, y llega a mi “soy Espíritu Encarnado”.

Pero faltaba responderle… , sentía era una respuesta verdadera, ajustada, pero al mismo tiempo sentía que podía resultarle chocante. Me dije: “Estás hablando con un ser que está en el camino del espíritu… aparentemente erró la pregunta… y no debe conducirse como el mundo común… después de todo, es la verdad…!!!

Así fue que escribí: “Soy espíritu encarnado”.

Gracias a su refinado espíritu… no se shoqueó, ni se enojó… tenía un buen manejo de su ego…

La respuesta fue: “Ahh… sí, es cierto… perdón.”

La sociedad en que vivimos niega la naturaleza del ser, por esa razón encontramos que cuando nos preguntan o se presentan dicen “Dr. Juan Perez…” o nombran sus trabajos: ¿Qué sos?... médico, mentalista, panadero, escritor… También sucede que si preguntamos a alguien por otra persona, nos diga: “el muchacho del auto rojo”…. Como si el vehículo que posee fuera su identidad!!. .. Vaya identidad cambiante!!!
Cuando nos preguntan “¿Quién sos?” también tendencia a pensar automáticamente en nuestro cuerpo, nuestra apariencia. Inmediatamente vamos hacía nuestra imagen. Y si preguntamos por alguien, tratamos siempre de querer saber cómo es físicamente. Hasta según lo conversado alucinamos si se viste con ropas finas, si es una persona de porte importante, que edad tiene, o por lo menos si es joven o dentro de que década está transitando. Nuestra mente apunta siempre a la apariencia material, porque está inscripta en el cuerpo material.
El humano tiene tanta necesidad de identificarse por su materialidad unida a la condición social que creyendo que es un cuerpo lo adorna, trata de hacerlo cada vez más notable, para lo cual usa ropa bonitas, su piel, tampoco es mostrada naturalmente, para eso existe el maquillaje, que según la necesidad de esconderse puede ser tan profuso que casi llega a ser una máscara. Hasta los olores naturales de la piel son disfrazados mediante perfumes.

Entonces cuando nos preguntamos “¿Qué soy?”… si bien estamos apuntando a ser un “cuerpo”, tampoco lo somos realmente. Nadie cuando nos imaginamos a nosotros mismos desde el punto de vista de ser “un cuerpo”, nos visualizamos desnudos, como realmente es nuestro cuerpo, sino que inmediatamente visualizamos el look que nuestro cuerpo exhibe, la imagen que queremos mostrar.

Una noche, estaba también manteniendo una conversación conferencia con varios hermanos. Les señalaba que debían auto estimarse, amarse y ellas continuamente decían cosas de sí mismas hasta degradantes.

A una de ellas le dije: “Decí soy hermosa”. Lógicamente ella se evaluaba en el aspecto físico, y como su autoestima era baja… no podía decirlo.

A partir de esto le dije: “Decí soy divina”, y otra vez las caritas de vergüenza. Cuando logro que responda me dice: “No, no soy divina”.

Era una hermana muy apegada al dogma católico y entabló una discusión diciendo que “divino” es Dios, y que ella no podía decir eso porque estaría cometiendo una herejía.

Fue así que le pregunté: “¿Sos hija de Dios….?” Y acá sí, con toda su fuerza dijo “SIIIIIII….!!! !!”

Bien le dije… “¿crees que un manzano puede dar peras?, “NOOO!!!”, me respondió… “Entonces si eres “hija de Dios” y la palabra divina proviene de la palabra Dios… siendo su hija sos divina!!!”
Ser divino, no significa ser un dios, ni un santo….. Ser divino significa ser “hijo de Dios”… Ser una entidad del universo, ser una chispa divina… y si nos reconocemos como somos “espíritus encarnados”, somos eso: “Seres divinos”.

Cuando Jesús dice: “ámense a sí mismos” no dice amen su persona, porque nuestra persona está regida por el ego… Él dice “Amen su Espíritu”, puesto que Él considera que “somos espíritu” y si amamos a Dios somos “Hijos de Dios”.
Todo lo que hagamos en nuestra existencia con esto, es responsabilidad nuestra. Sabemos que la personalidad terrestre (materia) tratará de ser, luchará por SER contra el espíritu. De nosotros depende, de nuestra voluntad humana depende, es nuestra voluntad y mente las que deben decidir “Qué soy”… un cuerpo animado?... o soy espíritu en un cuerpo?.....¿ Qué soy?....

Tendremos dos batallas: una que corresponde a la humillación del EGO (la personalidad o yo inferior), otra la personalidad contra el mundo que no querrá perder un ser material (persona almica). Acá es donde la voluntad humana debe luchar direccionándose hacia el Yo Superior.

Para lograr desarrollar el Yo Superior, nuestro Ser Divino, el yo Inferior debe humillarse, debe asumir al Yo Superior. El Yo Superior es quien una vez que logre manifestarse ha sido porque el yo inferior depuso su actitud egocéntrica irá hacia el Yo Superior y así se va cumpliendo la ascensión del alma.. Para que esto suceda, el yo inferior dejará de autocompadecerse, disminuirse, abandonará el EGO, la lucha de poderes , la ira, la envidia, el mirar hacia adentro y comenzará a abrirse con paciencia, compresión, valoración de su persona y de los demás, irá despertando la misericordia, el altruismo, la alegría de sentir que está dando, entregándose a los demás.

Comenzará a comprender que no está solo, e irá evolucionando siempre tendiente a unirse al Yo Superior.

Entonces respóndete “¿Qué soy?”… Si te respondes como yo sabrás que “sos divino”, “sos Hijo de Dios”, “Sos espíritu manifestado sobre la tierra en un cuerpo”, y como espíritu también sabrás que sos ETERNO. Por esta razón Jesús nos dice: YO SOY EL QUE SOY, EL QUE FUI Y EL QUE SERÉ.
Somos Uno
Con amor:
Eugenia

2 comentarios:

JOSÉ TADEO TÁPANES ZERQUERA dijo...

Ay, Eugenia:
Cómo me he divertido con las cosas que dices aquí. Me has hecho acordarme de varias cosas. Primero, por la vida que he llevado, muchas veces me he visto en público y me han preguntado quién soy, y esa pregunta siempre me produce inquietud, porque a estas alturas no termino de saber quién soy en verdad.
Me pasa que a veces estando en templos espiritistas los seres que se manifiestan, me tratan de un modo especial. Una vez en uno de esos sitios, como me el lider de aquella congregación me colocaba entre los médiums y me ponía a hacer todo lo que ellos hacían, y yo me cansaba mucho, pues para poder ir a esas sesiones, me quedaba sin comer, así que salía de ese sitio tan bajo de energías, que dije: "Me esconderé para no tener que participar de nada". Pues bien, todo estaba saliendo bien hasta que una señora poseíada por un espíritu me sacó de mi escondite, me llevó al centro del salón, me hizo unas cosas que supongo serian limpiezas espirituales, y cuando terminó me hizo un gesto como diciendo: "Bueno, ahora puedes irte".
Bueno, lo que te decía. Nunca sé presentarme. También me pasa que los amigos me presentan como varias cosas, unos como espiritista, otros como historiador, otros como poeta, otros como investigador, otros como ajedrecista, y bueno, otros, como ese negro de mierda...jejeje.
Yo siempre termino respondiendo de acuerdo a la persona que tengo delante. A veces ser sincero puede ser malo.
Mira, una vez iba en un autobús. Cuando vivía en Cuba (ahora vivo en España) acostumbraba a salir a la calle a "fluir", que es lo mismo que decir a andar dejando que el destino te lleve, dejando que la ley te utilice para lo que quiera. Me monté en un autobús, y claro, iba metido dentro de mí mismo y a la vez atento a las señales del espíritu, pues él tenía que decirme cual era mi parada. Como iba de pie y el autobús iba muy lleno, no dejaba pasar a los demás, pues estaba frente a la puerta de salida. En eso una persona me preguntó: "¿Te bajas en la próxima parada? Y yo, por ser sincero le respondí: -No lo sé. La persona se enfureció y me empujó con violencia. Y eso que sólo le había dicho la verdad.
Con respecto a esa que no podía decir que era divina, que no era capaz de reconocer su naturaleza crística, que no era capaz de interpretar su YO SOY, con algo más que su cuerpo físico, me has hecho recordar las discusiones que tenía con mis alumnas religiosas del instituto donde trabajaba como profesor. Algunas me consideraban un demonio por echar las cartas del tarot, por leer las manos, etc. Y se escandalizaban cuando les decía que Jesús no era Dios. Yo les decía: “Si Jesús dice que es Dios, pues yo digo lo mismo y repito su palabra”.
A veces por mortificar un poco a esas católicas recalcitrantes, les decía: “A ver, si una persona te dice que se suicida si no te acuestan con él, ¿qué haces? Ella se quedaban en estado de chock, no eran capaces de responder, y yo les decía: “Si piensas que tu virginidad vale más que la vida de un ser humano, menuda cristiana que eres”. Bueno, ya sé que era un poco malo con estas cosas, pero es que me gustaba hacer pensar a la gente.
Otra cosa, siempre he sido reacio a relacionarme con personas en las que reconozco crecimiento espiritual Yo prefiero estar con la gente normal, pues con ellos me siento más útil. No escapo de las sombras. Prefiero vivir entre ellas porque allí puedo poner un poquito de luz. No me siento un gran ser ni mucho menos, aunque sí reconozca en mí un poco de entendimiento de los misterios de Dios.
Dentro de mí va esa lucha constante por mejorarme como ser humano. Soy muy exigente conmigo mismo, pero esa lucha interna desde fuera no siempre se ve. Y mi lema es predicar con el ejemplo.
Luego entiendo que cuando uno llega a tener comprensión de estas cosas que dices, es porque ha llegado al punto en que su crecimiento espiritual es óptimo para dar ese paso. Quien te lea, podrá pensar que eres sabia, que estás loca, que eres una estúpida, según su crecimiento espiritual. Pero sí creo que es muy útil que personas como tú, permitan que los que estén preparados para beber de ti, encuentren un sitio como éste, o simplemente se tropiecen contigo para que les sirvas de maestra.
Uy, se me hace tarde y tengo que cerrar el negocio. Besitos y que Dios te ilumine. Me cuesta trabajo escribir para ti porque siempre me estoy riendo y me vienen a la mente muchos chistes y cosas graciosas. Soy como un niño grande.
Besitos:
Tadeo

Eugenia dijo...

Bueno Tadeo....parece que nos reimos juntos, porque parezco una loca en el cyber riéndome de tus comentarios...!!
También me pasa que ya no sé presentarme...es que la vida toma otro giro, en el cual la apariencia no es lo importante..la forma dejó de ser y me ha pasado que en ocasión de serme presentada por MSN de voz a una hermana que estaba lejos, estuvo diciéndome todo su curriculum, desde el 3D...o famiuliar y estudios, hasta todos los títulos de multiples cursos...todo para que entendiera quien era...!!!...jajajajajaja, teníamos poco tiempo...menos mal...solo me informé (cosa que al instante olvidé) de estos asuntos y nada le dije de mi...que iba a decir...mi vidamaterial ya hizo su aporte para esta instancia...pero allá quedó...de actividad en el mundo...en este momento solo lo espiritual...Preparación...jajajaja...niungún curso de nada espiritual en mi haber..fue genial..!!
Creo que si me preguntan..diré...NADA SOY-TODO SOY...depende de vos!!
SOMOS UNO
Con Amor
Eugenia